El cacao amargo, también conocido como cacao en polvo sin azúcar, se obtiene moliendo los granos de cacao tostados y desgrasados. Este polvo conserva un sabor intenso y ligeramente ácido, característico del cacao puro. Es un ingrediente esencial en la elaboración de chocolate y productos de repostería, y se valora por sus propiedades antioxidantes y su contenido de minerales.